Fotografía: Esmeralda Lara. Badajoz 48 horas
Carmen es una metáfora del fatum, del destino inclemente que castiga el ansia de libertad y la rebeldía frente al patriarcado. Bizet eligió, acertadamente, una visión castizante (casi de cliché) del entorno hispano, que resultaba exótica al pensamiento foráneo, con pinceladas de España negra y oscurantista. Aunque en la partitura tan sólo encontramos seis números que exhiban rasgos netamente hispanos. La transición de opereta en sus inicios, hasta transmutar en ópera trágica, supone la ruptura de Bizet con sus anteriores composiciones comiques.
Carmen es el envés de
la concepción romántica de lo amoroso, el otro lado del espejo del amor
novelesco. Como se refleja en la habanera “Si tu ne m´aimes, je t´aime…”,
basada en una habanera de Sebastián Iradier titulada “El arreglito”. La entrada
de la mezzosoprano Olga Syniakova es espectacular, con su letanía al amor como
derecho y libertad en allegretto
(casi andantino) y el soberbio
empaste del Coro de Extremadura en el leitmotiv,
están arropados por una notable coreografía, donde el diseño de vestuarios juega
con gamas de grises y negros. Gran control en las frases cromáticas
descendentes, donde se evoca la sensualidad de Carmen. Expresión corporal
segura y voluptuosa por parte de la cantante mientras el Coro, al cambio de
modo, responde en forma concertante. Destila suavemente las ligaduras y los
expresivos portamentos de voz de
octava o la técnica del messa di voce
(apianar) con maestría y fluidez. En esta aria ya encontramos los cambios
dinámicos extremos que acompañarían al romanticismo musical. La orquesta
acompaña la enfatización del texto. La cantante; de amplio registro; hizo gala
de un poderoso vibrato, voz redonda y elegante fiato. La expresión dramática en
esa tierra de nadie entre la sensualidad refinada y la zafiedad adonde puede
conducir el personaje, sin pérdida de la necesaria carnalidad.
Fotografía: Esmeralda Lara. Badajoz 48 horas
El elenco extremeño,
soberbio. Mar Morán compone una pícara y jocosa Frasquita, con certero control en el ataque, un timbre señero, su
habitual seguridad en la proyección, brillantez en el agudo y opulencia de
medios. Rubén Molano (Dancaire), de poderoso y metálico timbre, demuestra
tablas sobradas para la ocasión. Micaela
nace desde la voz de una Irene González de canto bien delineado, potente en el
centro y los agudos, con atractivo timbre. Ricardo Jara (Andrés) y Sergio
Aunión (Remendado) con voz de denso cuerpo y atractivo color. Ricardo Jara
(Andrés correcto en la brevedad de su personaje
La puesta en escena es seductora
e ingeniosa. Siete chimeneas-puertas sobre las que el maping proyectado va
cambiando escenarios con exquisito gusto y sincretismo. La dirección de Pedro
López Bellot y Marife Suárez (ayudante) es espléndida. La estética, de carácter
vanguardista, rompe el cliché castizo-estereotipo en base al atractivo
vestuario, sin los excesos conceptuales y visuales en los que abocan otras
propuestas operísticas con ansias frustradas de rupturismo. Todo está en su
justa medida. El movimiento escénico ágil, fluido, con gran utilización de todo
el escenario. El vestuario, a caballo entre los años 40 y el particular
imaginario de Luisa Santos, sobresaliente. Los guiños a las comedias de
puertas, el aprovechamiento de las chimeneas con las hermosas proyecciones (Nuria Prieto) que se
mimetizan para transmutarse en sevillana taberna, albero de matiz espagnolo o fábrica de tabacos. El juego
de la iluminación (Jorge Rubio) aporta calidez, dramatismo o instantes de
regocijo con una inteligente utilización del foco, de las sombras y las
proyecciones sobre los personajes.
Fotografía: Esmeralda Lara. Badajoz 48 horas
Las coreografías de
Fuensanta Blanca son de enorme esteticismo, jugando con amplios grupos y
contrastes, con las líneas de fuga y la composición pictórica. Resolviendo las
escenas de masas con claridad narrativa, equilibro en el tempo y estética voluntariosa. El trabajo del Coro de Extremadura,
fusionando el canto con el movimiento y empastando en situaciones altamente
complicadas, es para quitarse el sombrero. El esfuerzo de Amaya Añua ha dado
frutos de profunda belleza, extrayendo el sabor localista que posee la
brillante escritura coral. Asimismo, las
voces blancas (María Rodríguez) destilan todo su potencial en el coro “Con la
guardia montada…”, donde los golfillos son sustituidos por niños con uniformes
escolares.
Enorme acierto la inclusión de un decano del
teatro como Juan Carlos Castillejo que aporta calidad dramatúrgica a la escena
en la taberna de Lillas Pastia o con un simple carrito de limpieza del albero
(inteligente entreacto).
Desde los primeros
compases de la obertura, en forma de
rondó, la orquesta aborda un posicionamiento descriptivo, con instantes casi
impresionistas, donde brillan los instantes pizzicato de violas y chelos en “La
marcha de los dragones de Alcalá” o los tutti
orquestales con vertiginosas cuerdas, maderas y metales, acompañadas de
timbales y platillos. De enorme belleza es el interludio del Acto III.
Simbiosis entre la flauta y el arpa que se hibridan con el clarinete y la
cuerda con un hermosos pizzicato de violas, concluyendo en un pianíssimo de
carácter etéreo bajo la diestra batuta de P. Mauricio Sotelo-Romero. La
partitura incidental encuentra una traducción precisa y consigue permanecer en
segundo plano, casi simbiotizada con las voces, sin solaparlas. Un pulso
difícil para la batuta, ya que la escritura mistura el melodrama más desaforado
con un luminoso jolgorio. Tanto los tutti
como las intervenciones solistas dejaron momentos de depuradas técnica y
estética.
Alejandro Von
Büren está adornado de las condiciones
que requiere un “barítono di grazia”. Su Escamillo goza de excelente
musicalidad y arrojo. La “Canción del toreador” es apoyada por la orquesta en
acompasado ritmo de cuerda y motivos sincopados en los metales.
Irene González es
Micaela. Posee un centro de voz ancho, como solicita la partitura, de amplia y
ágil emisión y conmovedor registro dramático. Voz redonda, extensa, de
cincelado fraseo. Eduardo Pomares (Don José) brilla especialmente en la romanza
de flor “La fleur que tu m´avais jetée”, con línea vocal depurada, amplio arco
expresivo, extensión en los matices (hasta el Si bemol) y pianísimos que
proyectan sensación de vulnerabilidad sentimental. La hermosa iluminación
potencia el instante retrospectivo del Don José con un agudo final bien
colocado. Laura Orueta (Mercedes) de ágil proyección brilla en los instantes a
dúo con Mar Morán (Frasquita). Los instantes vocales compartidos por las
“contrabandistas” tiene un alto nivel de empaste y amplia paleta cromática. Luis
Rendas Pereira como Zúñiga, con buen registro y agilidad dramática. Es de
agradecer el impecable acento francés en los intérpretes.
Fotografía: Esmeralda Lara. Badajoz 48 horas.
Pleno de humor, el soberbio quinteto que interpretan Carmen, Frasquita, Mercedes y los contrabandistas Remendado y Dancaire. La conjunción del juego de voces con el sonido orquestal es esplendorosa. También destacan los momentos de contracanto del dúo final con acentos lastimeros y turbadores, de claro fraseo.
Algún instante rompe el
excelente tono general de la dramaturgia, debido a los acentos esforzados de
algunos cantantes, aunque en el caso de Carmen proporciona una nota de
exotismo.
Colaboraron estudiantes
del grado superior de Estilismo y Dirección de Peluquería del instituto San
José, del grado medio de Estética y Belleza del colegio Sopeña y de
Bachillerato de Artes del Reino Aftasí.
Ópera Joven ha colocado
el listón a gran altura. Los espectadores lo agradecieron con fervorosos
aplausos a la espera de una próxima edición.
AYUDANTE DE DIRECCIÓN
MARIFE SUÁREZ
ESCENOGRAFÍA Y
VESTUARIO LUISA SANTOS
AYUDANTE DE VESTUARIO
VICTOR DURÁN
CARACTERIZACIÓN ROCÍO
GONZÁLEZ
COREOGRAFÍA FUENSANTA
BLANCO
VÍDEO ESCENA NURIA
PRIETO
DISEÑO DE ILUMINACIÓN
JORGE RUBIO
IMAGEN Y DISEÑO GRÁFICO
PAQUI TREJO
MAESTRO REPETIDOR JOSE
ALBERTO SANCHO
SUBTÍTULOS JAVIER BARCO
ANTÚNEZ
ORQUESTA
ÓPERA JOVEN 2024
VIOLÍN MANUEL CAMACHO,
SELENA GUTIÉRREZ,
ALEJANDRA MIRANDA Y
CELIA ROMERO
VIOLA DAVID MONTES Y
MIGUEL CALDERÓN
CELLO FRAN CARMONA Y
JULIA VAN LEEUWEN
CONTRABAJO PASCUAL
PASTOR
FLAUTA SOFÍA SALAZAR
OBOE FRANCISCO JAVIER
RUÍZ
TROMPAS RUBÉN VENEGAS Y
MIGUEL ÁNGEL PULIDO
PERCUSIÓN SARAI AGUILERA
CLARINETE ANTONIO
MARTÍN
FAGOT ÁLVARO GONZÁLEZ
GRADO SUPERIOR DE
ESTILISMO Y DIRECCIÓN
DE PELUQUERÍA
DEL IES SAN JOSÉ,
BADAJOZ
MARÍA BALONERO · ANA
BLANCO
ELENA DONOSO · MARINA
DURÁN
NATALIA GIROL · ROSA
GONZÁLEZ
NOELIA GONZÁLEZ ·
ISIDRO LARA
GRADO MEDIO DE
ESTÉTICA Y BELLEZA DEL
COLEGIO SOPEÑA
BADAJOZ
Fotografía: Esmeralda Lara. Badajoz 48 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.